
Karla Souza no es la única que ha revelado haber sido víctima de abuso sexual en la industria del entretenimiento nacional.
Más actrices han comenzado a alzar la voz para denunciar públicamente acoso y violencia sexual por parte de productores y directores mexicanos.
En el mismo espacio que Souza, en CNN, la actriz mexicana Stephanie Sigman también compartió su testimonio.
La protagonista de la película "Miss Bala" narró cómo en una fiesta, un productor de cine y su esposa la tomaron del pelo, la jalaron a un cuarto obscuro y la tocaron sin su consentimiento.
Sigman dijo que solo tenía 22 años y, aunque no reveló su nombre, detalló que era conocido y "excéntrico". Aquella vez se defendió a manotazos.
"Dos años después lo vi en un festival de cine y me volvió a pasar. Me estuvieron literalmente persiguiendo por una fiesta diciéndome piropos, ‘quisiera hacerte esto, quisiera hacerte el otro’, yo agarraba a mis amigos y los ponía de escudo. Y se los dije en la cara ‘me siento muy incómoda, ¿porque me haces esto?’”, narró.
En redes se dice que podría ser Carlos Reygadas.

Paola Nuñez, actriz que inició su carrera en telenovelas mexicanas, denunció terror psicológico.
Dijo que por un lapso de dos meses fue víctima de un productor con quien trabajaría en una película.
"Nunca fue algo directo, nunca intentó tocarme", aclaró.
Núñez tampoco mencionó el nombre del productor, pero dijo que la convenció de que nadie en la producción, ni actores ni escritores, la querían en la película porque no era suficientemente guapa o sexy y que él le había conseguido el trabajo.
La actriz también describió que le pidió que se tomara fotos desnuda y que finalmente renunció al papel.

No olvidemos que en noviembre pasado, Ana Claudia Talancón respaldó a Karla Souza cuando dijo por primera vez que había sufrido acoso, y reconoció que también fue víctima e incluso de otros abusos.
"Desgraciadamente, alguna vez me acuerdo yo estaba muy jovencita, muy chica y me intimidé totalmente con alguien que estaba hablando por teléfono, mientras estaba firmando un contrato. Se portó de lo más grosero en la llamada telefónica y al voltearse (dijo) ‘si bueno, cómo estamos’, diciendo vas a firmar el contrato o hay una lista de niñas listas para firmar el contrato que te estamos ofreciendo a ti.
En ese momento yo pensaba: 'no, pero lo quiero leer, espérenme'. No supe bien qué hacer, gracias a Dios las cosas se resolvieron bien, pero fue intimidante, y algunas otras veces con personas que abusan de su poder”, dijo durante la alfombra roja de la obra de teatro "Privacidad".

Este podría ser el incio de algo más grande. Sin embargo, como ya algunas actrices lo han consignado, temen denunciar por la vía legal porque no se sienten respaldadas por un sistema de justicia que realmente investigue y castigue a los responsables.
¿Estará comenzando un movimiento similar al #MeToo de Estados Unidos en México? ¿Los responsables enfrentarán consecuencias legales?